EL RIESGO DE AUDITORÍA EN TIEMPOS DE PANDEMIA

 

EL RIESGO DE AUDITORÍA EN TIEMPOS DE PANDEMIA

Primer semestre, 2020.

    La función de la auditoría como servicio de expresión de opinión, en el desarrollo de la contingencia generada por la pandemia global del Covid-19, ha sido afectada sustancialmente en cuanto a la forma de desempeñar el examen sobre los estados financieros; debido principalmente a limitaciones importantes de funcionamiento, movilidad y de distanciamiento social decretadas por las autoridades locales.

Con este escenario, el riesgo de auditoría aumenta de forma significativa; y surgen ciertas interrogantes: ¿Qué decisiones debemos tomar en esta contingencia?, y adicionalmente, ¿Debemos replantear el alcance de los programas de auditoría?, entre otras.

El riesgo de auditoría se puede ilustrar, en que el auditor, sin darse cuenta no modifique su opinión, o emita una opinión inapropiada sobre estados financieros que contienen inferencias, desviaciones o errores materiales importantes. Teniendo en cuenta los efectos en los cambios por la pandemia, y el riesgo de extraer conclusiones erróneas; es necesario tomar decisiones oportunas que nos ayuden a atenuar el riesgo de auditoria a niveles más bajos, entre estas podemos mencionar:

•          Diseñar nuevas estrategias y políticas de trabajo.
•           Acudir a las tecnologías TIC¹.
•           Revisar el alcance de los programas de auditoría.
•           Adaptar los procedimientos a las circunstancias.
•           Agudizar el control de calidad y la supervisión.

La perspectiva de estas decisiones, atiende las principales características del riesgo de auditoría, y definen prioridades de acción a los nuevos comportamientos, y así lograr recabar evidencia suficiente y competente, es decir, evidencia relevante y válida, para fundamentar debidamente la opinión sobre los estados financieros.

Es de destacar que la evidencia en su mayor parte es persuasiva y no definitiva o concluyente; esto, debido a que la evidencia es resultado de procedimientos muestrales que giran en torno a una materialidad calculada previamente. EL IASC² define la materialidad o importancia relativa de la siguiente forma: “si la omisión o representación errónea de la información, pudiera influir en las decisiones económicas de los usuarios, tomadas con base en los estados financieros…”

En la contingencia actual, es cuando saltan las diferencias entre la planificación de la auditoría y la realidad del trabajo tradicional; y el principio fundamental de “competencia y diligencia profesional”, del código de ética del IFAC³, mide fuerzas con el riesgo de auditoría. Más allá de un llamado de atención de la crisis actual, los efectos en los cambios y las circunstancias, traen en parte beneficios; uno de ellos es que los programas de auditoria, ya no se ven como un requisito de control de calidad; sino como una necesidad, una guía y una salvaguarda de que no se omitirá ningún detalle importante.

Para el IMCP⁴, “un programa de auditoría es un enunciado lógicamente ordenado y clasificado de los procedimientos de auditoría…”. Entonces, los programas de auditoría facilitan la revisión de la auditoría, controlan lo realizado y lo pendiente del trabajo y a su vez delimitan responsabilidades.

Es de considerar que en la presente contingencia exista una integración del compromiso de auditoría, ya que el riesgo de auditoría no sólo proviene de representaciones erróneas importantes, sino también de información fraudulenta. El sistema de control interno es uno de los más afectados en la actualidad, ya que la cadena de control ha sido rota en varios niveles, es decir, ha experimentado cierta flexibilidad y pueda que no impida ni detecte un error o fraude material.

El auditor debe aplicar el escepticismo profesional ante esta pandemia; recalcular la importancia relativa de la información, además de la extensión, oportunidad y alcance de los procedimientos de auditoría; ya que, muchas falsedades no detectadas constituyen fraude intencional y no simples errores.

 

Gerson Noé Soriano Villalobos.

Licenciado en Contaduría Pública.

Socio Director de @VillarteCorporate.

+(503) 7114-8963

San Salvador, El Salvador, CA.

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TIC¹: Tecnologías de la Información y Comunicación || IASC²: Comité de Normas Internacional de Contabilidad || IFAC³: Federación Internacional de Contadores || IMCP⁴: Instituto Mexicano de Contadores Públicos.